Un día cualquiera en el instituto, nos comentaron que íbamos a tener una charla de una empresa llamada Canarias Masterclass, lo que no sabía en ese momento es que esa charla me iba a cambiar la vida.
Cuando nos encontrábamos en la charla y nos hablaron de qué iba el proyecto, me quede súper ilusionada con  la labor que hacían, y cómo no, me apunté a su concurso.
Fueron pasando las pruebas y cada vez estaba mas ilusionada, quedaba poco para ver si podía cumplir uno de mis sueños, ser profesora por un día. Y en un abrir y cerrar de ojos, me encontraba entre todos los ganadores del concurso. Ese día, conocí a mi mentora, Merche, una persona encantadora y apasionada de su trabajo. Ella me contó un montón de cosas acerca de su vida y su trabajo y cada vez me iba viendo más reflejada en ella, tenía las mismas inquietudes y pasiones que yo, y eso hizo que encajásemos de un momento a otro.
Se acercaba el día de mi masterclass y yo cada vez estaba más nerviosa y con mas ilusión. Pero un día antes de este gran momento, me hablo mi mentora y me dijo que no podía asistir conmigo al día siguiente por problemas personales, aunque eso fue un golpe, me dijo que me dejaba en manos de una de sus compañeras, Natalia.

A la mañana siguiente me levante con muchas ganas de lo que estaba por venir ese día, y cuando me di cuenta me encontraba en la puerta del CEIP La Cerruda en Vecindario.
Esa tarde Natalia tenia que cuidar el grupo de mi mentora Merche, además del suyo, por lo que mi compañera y yo le fuimos de gran ayuda.
En el primer turno, estaba un poco nerviosa pero cuando paso un rato, me sentí una más en el grupo. Ayude a varios niños con algunas fichas que les habían marcado y tras una hora nos pusimos a jugar a juegos muy didácticos y entretenidos.
En el segundo turno, ya me sentía mucho mas cómoda y confiada, por lo que me solté más y pude disfrutar mucho más de la experiencia.
Lo que mas me sorprendió de todo el día fue las distintas necesidades de los niños, ya que la gran mayoría tenían un alto grado de adaptación curricular, como por ejemplo una niña de 6º de primaria que tenía el curso adaptado para un estudiante de 1º/2º de primaria.

Esta experiencia me ha servido para darme cuenta de que ser profesora es mi trabajo soñado, quisiera poder ayudar tanto como Natalia y Merche hacen cada día con esos niños. Además la masterclass también me sirvió para aprender distintos recursos didácticos para captar la atención de los niños y ayudarlos a mejorar.
¡Gracias masterclass por dejarme cumplir uno de mis sueños!