Siempre me ha dado vergüenza hacer presentaciones. Tenía ese miedo irracional, pero desgraciadamente tan común, a quedar expuesto ante desconocidos. Por eso, cuando nos explicaron en qué consistía Canarias Masterclass y nombraron que una de las fases consistía en hacer un vídeo de presentación, lo primero que pensé fue que no. Qué vergüenza hacer un vídeo, y además, ¿qué tengo yo para poder ganar?

Los pensamientos negativos aparecieron y me invadieron hasta que, afortunadamente, surgirían las dos únicas preguntas que tendría que haberme hecho: ¿Y por qué no? ¿Qué puedo perder?

A lo largo de este concurso, tan sólo he perdido una cosa en comparación con las muchas que he ganado: la vergüenza.

Entre la primera y la segunda fase llegó el confinamiento. Lo que a priori vi como un problema a la hora de hacer el vídeo, pues ya no podría salir a la calle a grabar y los recursos se limitaban, se convirtió en un reto: tan sólo podía, o bien utilizar fotos y vídeos que tuviera guardados, o grabar dentro de casa. Fue el momento de ponerse manos a la obra.

Tras dos intensas semanas con lluvias de ideas, noches de insomnio, edición y montaje, el vídeo ya estaba publicado y tan sólo quedaba esperar.

No puedo expresar con palabras toda la emoción que sentí cuando leí mi nombre en la lista de ganadores y desapareció por fin la incertidumbre.

Finalmente, llegó mi masterclass con David Macías Verde, radiofísico del Hospital Universitario San Roque.

Dentro de la física, existen muchísimas ramas que van desde las más conocidas como la astrofísica o la física nuclear, hasta otras que lo son menos como la biofísica o la geofísica. Entre estas, existe una dedicada a emplear los conocimientos de esta rama de la ciencia sobre la medicina, la física médica.

David me guió por toda la zona de oncología del hospital mientras me enseñaba cuál es su labor ahí, los instrumentos que se utilizaban en el tratamiento de tumores cancerígenos, bien sea con equipos Rayos X o con elementos radiactivos como el Iridio, o cómo diseña el tratamiento de cada paciente, entre muchísimas otras cosas. Incluso observé cómo se trataban algunos pacientes con David y Daniel, técnico de rayos del hospital. Es increíble lo mucho que puedes aprender sobre un oficio viviéndolo desde dentro.


Ahora tengo una meta fijada, un primer proyecto a largo plazo sobre el que ya he dado los primeros pasos.

Tan sólo me queda dar las gracias a todo el equipo de Canarias Masterclass por darme esta oportunidad y preocuparse por encontrar a profesionales como David, a quien le estoy igualmente agradecido por abrirme los ojos hacia una futura profesión que, a cada minuto, se acerca.

¡Un saludo!